Reseña cine: Posesión Infernal (2013).

Título: Evil Dead / Posesión Infernal.

Género: terror, gore.

Director: Fede Álvarez.

Actores: Jane Levy, Shiloh Fernandez, Lou Taylor Pucci, Jessica Lucas, Elisabeth Blackmore.

Año: 2013.

Valoración: 7,5/10.

Cinco amigos van a pasar el fin de semana en una cabaña en el bosque con el objeto de ayudar a un miembro del grupo en su proceso de desintoxicación. Pero cuando uno de ellos invoca, accidentalmente, a un demonio, éste los va a poseyendo con el objetivo de lograr sus almas para revivir por completo.

No sabía muy bien qué esperar de esta nueva versión, pero finalmente la película me gustó bastante. Primero porque ha tratado de dar una nueva visión de la historia original, crear sus propios personajes y su propia atmósfera. Puedes ver esta película sin haber visto las anteriores, aunque te perderás bastantes guiños. Así que me gustó que no tratara de copiar plano por plano la anterior, sino crear algo distinto tomando como base aquella idea. 

En ese sentido, se cuenta una historia con cierta base, se trata de crear personajes sólidos (no ponerlos simplemente para que mueran), y en general la película tiene un buen ritmo. Me gustaron todos los detalles relativos al libro, como se lo presenta y sus ilustraciones me parecieron geniales. Realmente logra subrayar esa sensación de que tiene algo maligno.

Lo que más me ha gustado de la película es su atmósfera. Tanto la ambientación, como los sonidos, la luz tenue y sucia, la cabaña y sus alrededores... me pareció que crea un buen conjunto homogéneo que haga que te metas en la película. Además, la combinación de la ambientación con la historia, el ritmo y una muy lograda banda sonora hacen de ella un buen conjunto que logra atraparte. Quizás la primera parte de la película, los primeros 20 minutos, se hacen algo más pesados. Pero luego avanza bien hasta llegar a un gran clímax.

En el apartado de efectos, me alegra ver que han hecho poco uso de los efectos digitales y se han centrado más en los "efectos tradicionales", como el maquillaje, jugar con la luz y ese tipo de cosas. Contribuyen a reforzar la atmósfera de la película.

En cuanto a la película en sí, no la definiría como una película de miedo, pero sin duda sí que es una película sangrienta. En ese sentido no se han contenido demasiado, y al igual que su predecesora, hay mucha sangre y vísceras. Así que no la considero "la experiencia más aterradora que vas a vivir" como te la venden en los carteles, pero no deja de ser una buena película dentro de su género, que es más bien el gore antes que el  de terror.

Para mí, el punto más flojo de la película fueron los actores. Me resultaron insulsos y muy poco carismáticos, sobre todo en comparación con la película anterior. Ése fue el único punto flojo de la película.

Así que, en resumen, es una buena película si lo que buscas es una atmósfera oscura con toques de terror, y sobre todo mucha sangre. Como dije al principio, no es necesario haber visto las anteriores, pero si eres fan de la saga, recomiendo quedaros hasta después de los créditos. Hay una pequeña sorpresa ;).