Reseña Maquillaje: Maybelline Super Stay Lipcolor.

Compré este producto no por sus características en sí sino porque buscaba un color grosella y fue el que más me gustó. Luego descubrí que tenía un "procedimiento determinado". En primer lugar se aplica el color como si se tratase de un gloss, y luego una especie de cacao que en teoría lo fija para que dure algo así como unas 16 horas (teniendo en cuenta que el día tiene 24, son bastantes horas...). Siempre es preferible una barra de larga duración, por supuesto, pero el aspecto final dista mucho de ser lo que yo buscaba.

En primer lugar porque el color en sí mismo no queda uniforme, hay que emplear mucho para que se vea bien, o cuanto menos "cogerle el truco" al producto. Cuando se aplica el cacao, es cierto que dura más que otras barras convencionales, pero la diferencia no es tanta. Incluso diría que tiene un importante punto en contra: poco a poco a pintura se va yendo hasta que lo única que queda es el contorno, con lo que queda algo ridículo. No pongo en duda que dure más que otras barras, eso si no comes y no bebes, por lo que al final su duración viene a ser la misma con otra marca convencional. En resumen, que para que quede bien requiere un poco más de trabajo, tiene algo más de duración, pero si a día de hoy supiera lo que sé, creo que me decantaría por otro producto.

Lo mejor: su bonita gama de colores.
Lo peor: requiere práctica conseguir un buen acabado.