La chatelaine era un complemento victoriano que podía incorporar diversas herramientas que se consideraba que una mujer podía necesitar en cualquier momento. Hay diversos ejemplos de esta clase de utensilios y podían estar orientados a temáticas precisas. Venía a ser la navaja suiza de las mujeres en aquella época.
Este complemento nace en el siglo XVIII y se ajustaba a los vestidos de las señoras a la altura de la cintura. Podría incluir desde tijeras, dedales y agujas para una costurera, a pinzas y termómetro para una enfermera.
Estos pequeños utensilios se popularizaron a lo largo del siglo siguiente, donde se buscó que no sólo fueran prácticos, sino también hermosos, y a veces el diseño superaba la practicidad.
El uso de cadenas para llevar consigo objetos preciados se remonta a siglos atrás, cuando las mujeres llevaban consigo pequeños estuches donde guardaban posesiones muy preciadas u objetos de higiene personal. El reloj con cadena se introduce en el 1510, y era utilizado tanto por hombres como por mujeres.
Sin embargo, el término chatelaine no fue empleado hasta 1828 cuando la revista londinense El mundo de la moda hizo referencia al término. Proviene de una palabra francesa de origen medieval que se traduce como la señora de la finca, y que a la larga también hizo referencia a a la cadena de la que se colgaban las llaves del castillo. De ahí que muchos de estos accesorios lleven una llave con carácter simbólico.
En español, la palabra se traduce literalmente por "castellana". Sin embargo, creo que el término más próximo sería el de leontina, que es la cadena que se empleaba para colgar el reloj.
Las chatelaines eran creadas por joyeros como Tiffany, Fabergé o Lalique. Estos objetos llegaron a popularizarse tanto que se empleaban como elemento meramente decorativo, e incorporaban incrustaciones de diamantes y otras piedras preciosas.
La chatelaine tenía dos posibles diseños para usarse: un medallón en la parte superior junto con una lengüeta de metal que se engancha a la cintura; o bien el modelo americano que incorporaba un broche muy largo en la parte posterior. Hablamos de una época en la que los vestidos no tenían grandes bolsillos, y los bolsos solían tener un tamaño más bien pequeño. La chatelaine permitía tener siempre a mano utensilios básicos, de manera que se llegó a un alto grado de especialización: las había para enfermeras, para pintoras, para deportistas, etc.
Todos los miembros de la sociedad la usaban, desde las criadas a las señoras de la casa. Con el tiempo fueron incorporando otros elementos decorativos como cruces, corazones, anclas o estrellas. Incluso se creaban algunos modelos orientados a los períodos de luto.
Es curioso resaltar que este complemento se empleaba tanto en el hogar como fuera del mismo. Los que tenían una función utilitaria se usaban únicamente dentro del hogar. Con el tiempo se desarrollaron modelos estrictamente decorativos para incorporar a trajes y faldas, que solían incluir un gran broche y una esfera de metal al final de la cadena.
Los modelos más básicos solían incorporar un monedero y un estuche para las gafas. Los que eran algo más completos incluían un cuaderno para notas, un lápiz, un frasco para perfume y un pequeño monedero lo bastante grande para que cupiera una moneda. Los cuadernos solían tener las hojas de marfil y apenas cinco o seis páginas. Otros incorporaban pequeños estuches de costura con agujas, hilo, tijeras e incluso cinta métrica. Hubo modelos que llegaron a tener hasta doce accesorios diferentes.
La chatelaine fue olvidándose porque se produjeron importantes cambios en la moda. El reloj de bolsillo pasó a llevarse en la muñeca. Una mujer cada vez más independiente, a efectos de atuendo, necesitaba sentirse más libre en sus movimientos. Por lo que muchos de los objetos que solían llevar en la chatelaine se destinaron a bolsos cada vez más grandes.
Fuentes:
Vaya! Muy interesante este post sobre la chatelaine, no había oído hablar de este complemento victoriano, y eso que aparece en muchas fotos de la época.
ResponderEliminarAnónimo - Si te fijas, en muchas películas y series de época, suelen llevarlo los personajes femeninos. Lo que pasa es que no se le presta mucha atención o está un poco escondido.
ResponderEliminarMuchas gracias por comentar :).