Hay días en que tengo muy claro en la cabeza lo que me quiero poner, pero también tengo días en los que no tengo ni idea. Y a veces no sólo no sé qué ponerme, sino que no estoy inspirada o no tengo muchas ganas de comerme la cabeza.
Me imagino que todos tenemos días como esos, en los que te tienes que vestir, no tienes ganas de complicarte demasiado, pero al mismo tiempo tampoco quieres ponerte "la primera cosa" que cojas de armario. Y me refiero a esas ocasiones en las que quieres ponerte algo especial para salir (no para ir al supermercado y cosas así, que sales del paso con casi cualquier cosa).
1 - Cómo decido lo que me voy a poner (cuando estoy inspirada). Normalmente, si estoy inspirada, suelo construir el look a partir de una de una determinada prenda que me quiera poner ese día (por ejemplo, me quiero poner una cierta camisa), de un estilo que quiera reflejar (hay días que soy más victoriana, y hay días que soy más Dark Boho y saco la bruja que llevo dentro) o sencillamente de lo que yo llamo "mi estado espiritual" (hay días que quiero todo negro, que se me apetece algo verde o llevar rayas).
A partir de esa prenda concreta, concepto o estado de ánimo, voy eligiendo el resto de las prendas. Por lo general, lo primero que elijo son las piezas centrales (falda+camisa/top o el vestido en cuestión, por poner un ejemplo), luego las prendas secundarias (rebeca, jersey en su caso, medias etc...), y finalmente los complementos.
Sobre los zapatos, normalmente es algo con lo que me como muy poco la cabeza, y los determino en función del frío (botas altas, botines, sandalias, zapatos) y de lo que vaya a hacer ese día (zapato cómodo o muy cómodo). Tengo dos pares de botas rojas, mientras que todos mis demás zapatos son negros. Por lo que mi única regla a seguir en cuanto a colores es que si escojo las botas rojas, el resto del conjunto será negro.
2 - Cómo decido qué ponerme cuando NO estoy inspirada. Las razones por las que no me decido sobre lo que ponerme suelen ser varias:
1) Quiero ponerme una determinada prenda, pero no logro encontrar una combinación de prendas que me guste;
2) Día terrible de "todo me queda mal";
3) Inspiración Cero.
Cuando me encuentro en alguna de estas circunstancias, que suelen ser más habituales, entro en una especie de situación de parálisis mental en la que amo y detesto toda mi ropa por igual. Mi mente se debate entre ponerme algo que ya me he puesto antes y que sé que me queda más o menos bien, y entre no ser conformista y sacarle partido a la ropa que tengo, particularmente a aquella que he usado menos.
Así que cuando llego a estos pequeños momentos "de crisis", lo que hago es dejar de agobiarme durante unos instantes y "respirar hondo". Vuelvo mentalmente al punto de partida de construcción de look y pienso en cómo me siento ese día para ir descartando opciones. Se trata de preguntarme a mí misma lo que quiero, como por ejemplo.
-¿Falda/vestido o pantalón?
-Si es falda/vestido, ¿corto o largo?
Si no he logrado sacar algo en claro de esas reflexiones o la idea que tengo en la cabeza sigue sin estar muy definida, acudo a mi mayor fuente de inspiración que es Internet. Busco ideas como "everyday goth look", que suele funcionarme muy bien, busco en páginas de chicas que tienen un estilo que me gusta particularmente como The Gothic Alice, o si quiero algo con una idea determinada, pues busco looks que incluyan esa prenda, estilo o color en particular.
The Gothic Alice
El ver los conjuntos e ideas de otra gente suele inspirarme mucho y animarme para no desesperarme, y sobre todo no conformarme con lo primero que encuentre.
3 - Mi "look de emergencia" cuando no sé qué ponerme. En esas ocasiones en las que no acabo de decidirme, y apesar de buscar ideas no estoy del todo convencida por ninguna, suelo tener una especie de "look de emergencia" que me funciona casi siempre.
Vestido de emergencia nº1 de encaje negro y corte imperio de Zara
Mi primera regla es descartar pantalones y faldas y acudir directamente a un vestido. La razón es que un vestido te simplifica la tarea ya que éste es por si sólo un look casi completo. Normalmente opto por un vestido corte imperio, pues es un corte que me favorece prácticamente siempre, y en cuanto al color por el negro, ya que si ese día estoy baja de ánimos o más insegura, hace que me sienta mejor.
Tengo un par de vestidos que me suelen funcionar casi siempre, que son los que veis en las fotos. No es que me los ponga únicamente cuando no sé qué ponerme, pero son una buena ayuda en esas circunstancias.
Tengo un par de vestidos que me suelen funcionar casi siempre, que son los que veis en las fotos. No es que me los ponga únicamente cuando no sé qué ponerme, pero son una buena ayuda en esas circunstancias.
Vestido de emergencia nº2 de terciopelo negro de Mango comprado de segunda mano
Si tengo la comezón de que ese día quiero llevar un segundo color o un estampado, lo introduzco a través de las medias o bien través de la rebeca o chaqueta que lleve encima.
Finalmente, me centro en reforzar el look a través de los complementos, sobre todo a través de colgantes y collares más llamativos para imprimirle algo de personalidad al conjunto.
En cuanto al resto de cosas, como botas o maquillaje, digamos que van surigiendo por sí mismos a medida que todo lo demás se va construyendo.
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