Mi truco para arreglar los anillos que me quedan grandes sin pasar por el joyero.

Uno de los problemas con los que nos podemos encontrar al adquirir un anillo a través de internet es que la talla no nos quede del todo bien, sobre todo si somos usuarios de tallas pequeñas.

Hace muchos años compré dos anillos de Alchemy a través de una tienda online, que finalmente resultaba que me estaban grandes. Al final, por pereza, por los gastos de envío y porque lo fui dejando, se me pasó el plazo para descambiarlos por una talla menor.

Me daba pena tenerlos en el joyero sin poder usarlos por miedo a perderlos, así que busqué una forma de poder llevarlos sin que se me cayeran.

Primero, busqué un anillo de mi talla, que no usaba mucho y que fuera liso. 

Luego lo encajé dentro del anillo de Alchemy de manera que al introducir ese anillo, suplía el espacio que me faltaba para que el anillo no se me cayese.

Es un truco muy sencillo y barato, quedando al margen la alternativa de llevarlos a un joyero para que os los achique. Sin embargo, hay que tener en cuenta que algunos modelos, por el hecho de tener dibujos e incrustaciones, sería una pena destrozarlos. Así que siempre queda este truco en caso de que no os queden otras opciones.