Cómo hacer tu propio broche de camafeo.

Para crear un camafeo totalmente artesanal y personalizado se necesita:

-Arcilla moldeable. La encontrarás en cualquier gran superficie en la sección de manualidades infantiles.
-Pinturas en color blanco y negro (o del color que tú elijas) y un pincel. Las témperas normales son suficientes, no tiene por qué ser pintura especial. Pero si dispones de ella por supuesto el resultado será mejor.
-Un rectángulo de terciopelo negro de 8x6 centímetros aproximadamente.
-Un rectángulo de encaje negro de 8x6 centímetros aproximadamente.
-Una cinta de tela negra de medio centímetro de ancho y de unos 20 centímetros de largo.
-Unas cuantas cuentas negras (opcional).
-Aguja e hilo negro.
-Barniz especial para arcilla.
-Pegamento especial para tejidos.
-Un imperdible de tamaño mediano o grande; o bien un soporte especial para broches que venden en las tiendas de manualidades y mercerías.
-Un mantel de plástico donde trabajar.
-Un lápiz, una regla, una lima de uñas y unas tijeras.

1 - Moldeado del camafeo: Una vez que tienes todos los materiales, disponte en el lugar donde vayas a trabajar. Ten en cuenta que lo tendrás ocupado durante algunos días. En primer lugar cubre la mesa con el mantel de plástico porque la arcilla ensucia bastante (y también la pintura y el barniz). Junto a ti ten un vaso o recipiente pequeño con agua ya que te ayudará a reblandecer y moldear mejor la arcilla. Extrae un trozo de arcilla, no muy grande, y haces una bola. Luego la aplastas hasta crear una superficie plana lo más uniforme que puedas de unos 0,3 ó 0,4 milímetros de ancho. A continuación puedes ayudarte de un objeto punzante (un lápiz por ejemplo, o algo que te sirva como cincel) para trazar la forma ovalada del camafeo en tu base de arcilla. Por supuesto es mejor cuanto más parejo quede. Hecho esto, trata de que ambas caras, o al menos una, quede bien lisa. Para ello humedece tu dedo índice con agua y "pule" con pequeños movimientos circulares una de las caras de la pieza, lo cual ayudará a alisarla. A continuación déjala secar hasta que endurezca del todo. Estas indicaciones vendrán en el paquete de arcilla, normalmente es un día entero.

Cundo hayas terminado no te olvides de cerrar bien el paquete de arcilla para poder utilizarla en el futuro. Envuélvelo con papel transparente de cocina o con una bolsa de plástico y guárdalo en un lugar fresco.

2-Pulido, pintado y barnizado: Una vez tu óvalo está seco, llega la hora de pintarlo. No obstante, si la forma no ha quedado muy perfecta, puedes utilizar una lima corriente de uñas para perfilar mejor su forma. Yo marqué con un lápiz hasta dónde tenía que limar y luego las fui limando con cuidado, y así logré mejorar la forma de la pieza. A continuación hay que pintarla. Yo elegí el blanco y el negro, pero puedes escoger cualquier otra combinación de colores. No es necesario que también pintes el reverso ya que éste no se verá, pero no olvides el canto. No obstante, es aconsejable tener al lado un modelo de efigie, o de las figura que vayas a pintar (una rosa por ejemplo) para tener una idea en mente. Incluso es aconsejable practicar un poco en papel antes de sobre la pieza. Es mejor que primero la pintes toda de negro, y a continuación pintes la efigie en blanco porque luego te será más fácil corregir. A continuación deja secar la pintura. Yo prefiero dejarla secar durante un día entero porque así me aseguro de que ha secado bien. El siguiente paso es el barnizado. El barniz ayudará a conservar mejor el color, el brillo y evitará que se caiga la pintura. El que yo utilicé era en spray, pero también los hay líquidos. Deja secar el tiempo que indique el producto.

3- Montura del broche: mientras seca la arcilla o la pintura, puedes ir preparando la montura del broche. Primero recorta el rectángulo de terciopelo negro en forma de óvalo. A continuación haz lo mismo con el de encaje. A éste yo le añadí unas cuantas perlitas negras para darle un toque diferente, pero es según los gustos de cada cual. Ahora pon el óvalo de encaje sobre el de terciopelo. Coge el lazo, dóblalo por la mitad dejando los extremos mirando hacia una de las partes inferiores y fíjalo con un alfiler en el centro del terciopelo. Con una aguja e hilo negro, cose estos tres elementos de manera que queden en el siguiente orden: terciopelo, encaje, lazo. No te preocupes por las puntadas porque no se verán ya que el camafeo va justo encima.

Lista la montura, una vez que el camafeo esté seco, utiliza el pegamento especial para pegarlo en el centro del encaje, en el punto donde has doblado por la mitad el lazo, ocultándolo. Cuando el pegamento esté seco, tienes varias opciones. Puedes también pegarle el imperdible, coserlo o simplemente engancharlo. En realidad esta última opción es la más sencilla. En las tiendas de manualidades también venden soportes especiales si te gusta más que el imperdible, pero éste tendrás que pegarlo. ¡Y listo! Ya tienes tu broche :).

Por supuesto también puedes utilizaro como adorno para decorar un bolso o una mochila. Pero ten en cuenta que es una pieza un poco delicada, así que piensa bien donde vas a colocarlo.